Carlo Ancelotti, el estratega que ha llevado al Real Madrid a la gloria en múltiples ocasiones, ahora enfrenta un partido fuera de las canchas… y no es nada fácil.
La Fiscalía lo acusa de fraude fiscal por más de un millón de euros en los ejercicios de 2014 y 2015, y el técnico italiano podría pagar un precio muy alto por ello.
La acusación: Hacienda no perdona
Según el Ministerio Público, Ancelotti habría omitido declarar los ingresos generados por sus derechos de imagen, pretendiendo haberlos cedido a otras entidades para evadir impuestos.
Aunque en su declaración sí reflejó su salario como entrenador del Madrid (más de 14 millones de euros en dos años), dejó fuera estos beneficios extra.
El técnico merengue ya ha tenido que hacer frente a embargos y recargos que superan los 243 mil euros, pero el fiscal no se conforma con eso.
La petición es clara: una multa de más de 3.1 millones de euros y, lo más grave, una posible condena de prisión.
“Nunca pensé en defraudar”
Ancelotti ha defendido su inocencia alegando que siempre negoció contratos con cifras netas y que nunca prestó atención a los derechos de imagen.
“No me di cuenta de que algo no era correcto”, aseguró ante el tribunal. Además, reveló que fue el propio Real Madrid el que le sugirió la estructura de pago que ahora lo tiene en problemas.
El entrenador insiste en que confió en sus asesores fiscales y que el modelo que utilizó es el mismo que han empleado jugadores y otros técnicos del club.
“Pensé que era lo correcto”, reiteró, asegurando que no tuvo una participación activa en el esquema financiero.
Mientras el técnico del Real Madrid sigue al frente del equipo, el partido legal que enfrenta podría tener consecuencias más allá del campo.
¿Saldrá ileso de esta batalla judicial o pagará caro este presunto fuera de juego con Hacienda?
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DIEGO LEIZA
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