El 15 de abril de 1957 México se sorprendió ante la muerte de su ídolo, Pedro Infante; a los 66 años de esta tragedia el actor y cantante mucha gente lo sigue recordando como uno de los mayores artistas del país, pero si te has preguntado cuáles eran sus pasiones, aquí te contamos.
Pedro Infante Cruz nació el 18 de noviembre de 1917 en el puerto de Mazatlán, Sinaloa; durante sus casi 20 años de trayectoria se convirtió en uno de los actores más destacados en el cine de oro mexicano con películas como Nosotros los pobres o Los tres García.
Aviación y motociclismo
Además del canto y la actuación, Pedro Infante se destacaba por sus grandes pasiones que incluso le ayudaron a protagonizar otras cintas como “A toda máquina” o “Pepe el toro“; pues los deportes, la aviación y las motocicletas fueron algunos de sus pasatiempos.
Gracias al éxito de sus películas, el ídolo de Guamúchil pudo sustentar una de sus más grandes pasatiempos, las motocicletas; talento que pudo demostrar en “A toda máquina” a bordo de su preciada Harley Davidson, cuya escena sobre su moto pasó a la historia y arrancó corazones.
No sólo tenía un peculiar amor por su Harley Davidson, también demostraba su fascinación por los vehículos con un Mercedes-Benz 300 color blanco con interiores en rojo conocido como “Alas de Gaviota”.
Esta pasión por los motores no sólo se limitó a su motocicleta ni automóviles, pues una de sus actividades favoritas y más conocidas fue la aviación, acumulando 2989 horas de vuelo como piloto bajo el nombre de “Capitán Cruz” en la empresa Transportes Aéreos Mexicanos S. A., (TAMSA).
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Era tanto su amor por sus aviones, que incluso llegó a decir “¡Cuando me muera, me quiero morir volando compadre!”, de manera profetica esta pasión lo llevo a su muerte el día 15 de abril de 1957 en Mérida, Yucatán tras un accidente aéreo.
Su destreza en los deportes
Con la trilogía de “Nosotros los pobres”, específicamente en la tercera película de Pepe el Toro, Pedro Infante demostró su buen físico y agilidad en el boxeo.
De acuerdo a su primera esposa, María Luisa León, la rutina del cantante y autor comenzaba desde temprano levantando pesas, remando y corriendo por el Bosque de Chapultepec, logrando un buen estado físico que lo ayudó a desempeñar el papel de “Pepe el toro”.
No limitándose a eso, el también llamado “Ídolo Inmortal” se relacionó con el beisbol, jugando en algunos equipos de su ciudad natal, Mazatlán.
Pues participó es una selección de Sinaloa durante un juego para recaudar fondos para los damnificados por un huracán en Cuba, donde fungió la posición de tercera base.
