Si hay una tradición que une a millones de personas al recibir el Año Nuevo, es comer 12 uvas al ritmo de las campanadas.
Pero ¿te has preguntado de dónde viene esta costumbre y qué simboliza cada bocado?
La tradición nació en España a principios del siglo XX, cuando los productores de uvas del sur aprovecharon un excedente de la cosecha para popularizar esta práctica.
Pero lo que empezó como una estrategia comercial pronto se convirtió en un ritual cargado de significado.
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Cada uva representa un deseo para los 12 meses del año que comienza.
Mientras suenan las campanadas, se dice que hay que comerlas con cada toque del reloj y pedir un anhelo diferente: salud, amor, dinero, éxito, o lo que tu corazón desee.
Además, hay quienes creen que esta práctica atrae buena suerte y prosperidad, especialmente si comes todas las uvas antes de que terminen las campanadas.
¡Cuidado con atragantarte en el intento!
En algunos países, incluso se acompaña de otras tradiciones, como usar ropa interior de colores específicos o guardar dinero en los bolsillos.
Sea cual sea el caso, las 12 uvas son mucho más que una tradición: son un momento mágico para soñar y proyectar un futuro lleno de esperanza. ¿Ya tienes tus uvas listas?
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