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“A mí ya nada me detiene”: La respuesta de una madre en búsqueda de justicia

Ya se cumplió un mes desde que Karen Andrea, madre de una de las víctimas, entregó la denuncia en la SEPH y la respuesta aún no llega a esta búsqueda de justicia.

Subrayado habló con esta madre incansable, pues pese a ella estar recibiendo violencia por parte de la escuela y otros padres de familia, continúa en la búsqueda de justicia para su pequeña.

La travesía de esta terrible experiencia aún no parece tener fin, pues ninguna instancia le quiere ayudar u orientar.

Karen Andrea ha tocado las puertas de la SEPH, el DIF, Derechos Humanos y la Procuraduría de Justicia de niñas, niños y adolescentes e incluso intentó acercarse a la Presidencia Municipal y estas puertas permanecen cerradas.

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La búsqueda de justicia de Karen

El caso lo tomó el PEPAEVE, Programa Estatal de Prevención, Atención y Erradicación de la Violencia Escolar, pero incluso ellos tienen actitudes violentas.

Se asignó a la psicóloga Blanca Daisy Hernández Vargas para llevar el caso, misma profesional que ha persuadido a Karen de desistir pues “el proceso va a tardar demasiado”.

Ella organizó una conferencia donde sólo participaron los padres de familia del grupo afectado, al momento de las preguntas incómodas, decidió terminar dicha conferencia.

También ejerció violencia psicológica y verbal contra esta madre de familia, pues al no asistir a una de esas reuniones para hablar sobre bullying y lo que contece con el niño agresor, se burló delante de los asistentes.

“Ya ven, le interesar su hija pero no está aquí”.

Esta psicóloga también está manejando el caso como un accidente que se malinterpretó, y al hacerse público el caso, se viralizó.

Karen también mencionó que no le permiten acercarse a la familia del niño, tanto profesores como la directora, las mantienen lejos y no permiten que se acerquen para establecer un diálogo.

La familia de este niño menciona que efectivamente fue un accidente, pues los pantalones se le cayeron a su hijo.

Pero a Karen le parece raro que dicho accidente haya ocurrido en más de una ocasión.

Al preguntarle cómo se dio cuenta de lo que le pasaba a su hija, esta mamá comentó que lo principal fue el cambio de actitud.

“Para empezar ella ya no quería ir a la escuela, hasta que ella pudo contarme lo que había pasado con su compañero”.

Actualmente Karen Andrea tomó la decisión de sacar a su hija de esta escuela, por seguridad y su bienestar, sin embargo, no va a desistir.

La menor se encuentra recibiendo ayuda psicológica por parte de la PEPAEVE.

Sin embargo, su madre considera que es deficiente y le gustaría obtener mayor ayuda.

“A mí ya nada me detiene, aunque ya no esté en esta escuela, voy a seguir buscando justicia para mi hija, también voy a apoyar a las otras mamás por sororidad como mamá y como mujer”.

Subrayado asistió al cierre de ciclo escolar para concer la situación más a fondo, pero los padres, aparentemente, no saben de este tema.

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