¿Te quejas por todo? Podrías padecer lamento crónico
Si tus amigos o familia te dicen todo el tiempo que eres un amargado, entonces mejor checa esta información
Si tú eres una persona que normalmente se queja por todo en su vida, lamentamos informarte que probablemente no se trate de una simple amargura, sino de una condición conocida como lamento crónico.
Y es que despotricar en contra del tráfico, el clima o incluso de lo mal que juega tu equipo de fútbol puede resultar liberador, pero cuando es muy recurrente deriva en todo lo contrario.
Según expertos en psicología, este proceso de quejarse es una función adaptativa del ser humano para liberar tensión o buscar algún tipo de validación.
Pero cuando ya es muy recurrente o abarca prácticamente la mayoría de contextos de tu vida, es cuando se convierte en algo que califican como lamento crónico.
El lamento crónico puede traer consecuencias muy negativas para tu salud, ya sea mental, emocional o hasta física.
Y aunque se trata de un campo de la ciencia que los expertos todavía no investigan tanto, consideran que se asocia directamente con la ansiedad o la depresión.
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¿Cómo dejar de quejarse por todo?
Suena complicado, en especial porque muchas veces la gente o la vida misma no cooperan a que dejemos de hacerlo.
Sin embargo, algunas acciones como las siguientes pueden alejarte del lamento crónico y conducirte a una vida mucho más tranquila y pacífica:
- Practicar la meditación
- Enfocarse en la búsqueda de soluciones
- Evitar personas o escenarios negativos
- Ser positivo a través de las palabras
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