Al igual que en los Mundiales, las mascotas son parte fundamental de la conexión del público con los Juegos Olímpicos.
Aunque se implementaron en Grenoble 1968, ya hay suficientes como para hacer un top con algunas de las que por su diseño encantaron a la gente. Así que aquí vamos:
Sam, Los Ángeles, 1984
Definitivamente su diseño es muy gringo, pero puede que sea eso precisamente lo que lo destaque de otros personajes.
Su apariencia amistosa y ese sombrero no hacen más que recordarnos al mítico Tío Sam.
Cobi, Barcelona, 1992
Este perro de montaña de los Pirineos destaca por su simpleza y sonrisa característica.
Tan caricaturesco que es imposible no sentir ternura por él.
Fuwa, Beiging 2008
Beibei, Jingjing, Huanhuan, Yingying, Nini, es el nombre de estas muñecas de la suerte que formaron parte de estos increíbles Juegos Olímpicos del 2008.
Cada una de estas mascotas refleja uno de los aros de la justa olímpica, además de transmitir elementos tradicionales de China.
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¿Y los peores?
No nos adentraremos tanto, porque probablemente termines con pesadillas, pero aquí te dejamos algunos que no terminan de convencer hasta la fecha.
Schuss, Grenoble, 1968
Esos ojos maniáticos, esa sonrisa perturbadora y una cara completamente roja que parece sangre. Simplemente no.
Amik, Montreal, 1976
Se supone que es un castor, pero el que lo diseñó (y los que lo aprobaron) seguro andaban en medio de un viajesote.
Neve y Gliz, Turín 2006
La idea es buena, la ejecución no tanto.
Algo en esas caras y esos cuerpos simplemente no transmite mucha confianza.
Y tú, ¿qué otros añadirías a esta lista?
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