Antes de que rodara el balón en la final de la Liga de Naciones de la Concacaf, Will Smith encendió el SoFi Stadium con un show que dejó a todos con la boca abierta.
Con 70 mil almas listas para el partido, el actor y rapero hizo de las suyas en el escenario, combinando nostalgia, fiesta y un espectáculo visual que parecía sacado de otro mundo.
Desde el primer beat de Gettin’ Jiggy Wit It, la vibra cambió. El público no tardó en sumarse al ritmo y cuando sonó Miami, el estadio entero ya estaba convertido en una pista de baile.
Entre luces impresionantes, efectos especiales y su inigualable carisma, Smith hizo que la espera del partido se sintiera más como un festival que como la previa de una final.
Acompañado por Jacinto Ross, el actor trajo de vuelta la esencia dorada del hip-hop con un toque de frescura, demostrando que el fútbol y la música pueden ser la mejor combinación.
Sin duda, su presentación fue un highlight de la noche, dejando claro que, aunque el partido era el evento principal, Will Smith también se llevó su propio trofeo en el SoFi Stadium.
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DIEGO LEIZA
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